lunes, 17 de enero de 2011

Teotihuacanos crearon al 'loberro'

Notimex_El Universal : : 16 de diciembre 2010

A partir de estudios de arquezoología aplicados a esqueletos de cánidos hallados en entierros de la Pirámide de la Luna y el Templo de Quetzalcóatl, en Teotihuacán, especialistas determinaron que esta antigua cultura practicó la hibridación del lobo y el perro.

El objetivo era criar loberros, un animal que se usaba en rituales y estaba asociado con la milicia teotihuacana.

"Lobos y perros comparten 99.8%de información genética, de ahí que la cruza de ambos animales practicada por los teotihuacanos pudo ser factible, y dio como resultado al loberro, un ejemplar que portaba la sangre divina del cánido silvestre, pero en un cuerpo manejable", precisó.

Así lo dio a conocer el arqueozoólogo Raúl Valadez Azúa, del equipo de especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) que analiza las osamentas de animales hallados en el Entierro 6 de la Pirámide de la Luna.

Ese Entierro fue descubierto en noviembre de 2004 por investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y Aichi Prefectural University, de Japón, como parte del Proyecto Arqueológico Pirámide de la Luna.

Casi a punto de concluir los análisis de arqueozoología -llevados a cabo por el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM-, el especialista detalló que a partir de la identificación de especies de restos de fauna hallada en la Pirámide de la Luna, se ha determinado la presencia del loberro en las ofrendas.

En ello influyeron también los estudios hechos en años previos a otros huesos de animales descubiertos en entierros del Templo de Quetzalcóatl, agregó.

"Se ha identificado como un animal creado por el hombre, que nos muestra tanto el manejo avanzado del uso de la fauna, como el conocimiento que tenían los teotihuacanos de la biología de las especies", acotó.

El especialista indicó que en este estudio, que además del análisis de los restos óseos, también incluye el análisis iconográfico de las representaciones de animales en la pintura mural y cerámica teotihuacana.

Subrayó que se ha ampliado el conocimiento del uso de la fauna en la cultura teotihuacana, que de acuerdo con las investigaciones hechas suman alrededor de 120 las especies animales identificadas, que fueron usadas con distintos fines.

"No sólo se limitaba al aprovechamiento de la carne, la piel o el hueso, sino que tenían un amplio conocimiento sobre la biología de los animales, lo cual se veía reflejado en la manipulación de los organismos, en prácticas, como la cautividad o quizá incluso su domesticación", opinó.

Entierros de élite

Valadez Azúa abundó que entre 1988 y 1989, como parte del Proyecto Arqueológico Templo de Quetzalcóatl, se descubrieron una serie de entierros, entre los cuales destacó el número 4, que estaba constituido por 18 individuos atados de pies y manos, que portaban indumentaria propia de guerreros de élite.

"Uno de los personajes portaba como parte de su indumentaria nueve maxilares que fueron hechos por los teotihuacanos, a partir de fragmentos de paladares y piezas dentales de varios ejemplares, que en un principio se creyó eran perros", destacó.

"A partir de medidas dentales y del paladar, así como de la forma dental, se identificó que ocho de los maxilares correspondían a híbridos de perro y lobo o loberros, tres a perros, dos a híbridos de coyote y loberro, y uno a la mezcla de coyote y perro", expuso.

El experto explicó que esa identificación, junto con el análisis de diversas pinturas murales de la Zona Arqueológica de Teotihuacán, llevó al equipo de investigadores a replantear el papel que jugaba el lobo en la cultura teotihuacana, como símbolo de la milicia.

Durante muchos años, cualquier representación teotihuacana que tuviera forma de cánido se interpretaba como coyote.

Es así que los artículos sobre la iconografía de esta cultura, realizados entre 1960 y 2000, la interpretación de una forma de cánido se asociaba con el coyote, observó.

"Ahora tenemos la información arqueozoológica que demuestra que, por cada osamenta de coyote que se descubre hay 20 lobos, lo que está llevando a repensar la interpretación de representaciones iconográficas de cánidos", aseguro.

Perro-Lobo


No hay comentarios:

Publicar un comentario